Otra noticias de las locuras de los adolescentes

Helsinki.- Familiares, amigos y compañeros de las diez personas muertas el pasado martes en la masacre perpetrada por un estudiante en un centro de formación profesional de Kauhajoki recordaron hoy a esas víctimas en un oficio religioso celebrado en esa localidad del oeste de Finlandia.

En el acto, al que acudió la presidenta del país, Tarja Halonen, el obispo Simo Peura llamó a los padres de familia a hablar "intensamente" de lo sucedido con sus hijos, para superar entre todos el terrible trauma.

En la matanza murieron diez personas, así como el agresor, el estudiante Matti Saari, de 22 años, quien se suicidó.

Las víctimas eran nueve estudiantes del centro, ocho chicas y un chico, además de un profesor.

El trágico suceso sacudió de nuevo a la opinión pública y la clase política finlandesa, tras otra matanza similar, ocurrida en Jokela (sur de Finlandia), en noviembre del año pasado, cuando otro estudiante, esta vez de 18 años, asesinó a ocho personas.

En ambos casos, los asesinos, Matti Saari y Pekka-Eric Auvinen, respectivamente, usaron internet para expresar su odio contra la humanidad y colgar vídeos de sí mismos disparando sus armas.

El hecho de que dos internautas dieran la voz de alarma no fue suficiente para impedir que los jóvenes perturbados llevaran a cabo las dos matanzas estudiantiles.